Esta semana os traemos para nuestro HITOS DEL CINE a una de mis películas favoritas, El club de la lucha, una de las películas más curiosas de las que he visto, que no desvela hasta el final su principal secreto el cual sorprende pero no tanto al público. A mi parecer se ha ganado un puesto en nuestra sección.
El club de la lucha (Fight Club), película de 1999, está basada en la novela homónima de Chuck Palahniuk. El film fue dirigido por David Fincher y protagonizada por un magnífico Edward Norton, Brad Pitt y Helena Bonham Carter. Norton interpreta al protagonista, un hombre común, del que no se revela su nombre, que está aburrido con su profesión en la sociedad estadounidense, por lo que funda un "Club de lucha" con un vendedor de jabones llamado Tyler Durden, interpretado por Brad Pitt, que conoce en un avión y se ve envuelto en una relación con éste y con Marla Singer, interpretada por Bonham Carter.
La novela de Palahniuk fue escogida por Laura Ziskin, productora de la Twentieth Century Fox, quien contrató a Jim Uhls para escribir el guión para la adaptación cinematográfica. David Fincher fue uno de los cuatro directores considerados y finalmente fue contratado por su entusiasmo hacia el proyecto. Fincher desarrolló el guión con Uhls y solicitó la ayuda a actores y otros miembros de la industria del cine. El director y el elenco compararon la película con Rebelde sin causa de 1955 y El graduado de 1967. Fincher intentó que la violencia de la película sirviese como metáfora del conflicto entre las generaciones jóvenes y el sistema de valores de la publicidad. El director copió los matices de la novela de Palahniuk para hacerla incómoda al público y evitar que anticipasen el dramático giro del final.
A los ejecutivos del estudio no les gustó la película y reestructuraron la campaña de marketing para tratar de reducir las posibles pérdidas. El club de la lucha no cumplió las expectativas del estudio en taquilla y recibió reacciones contrariadas por parte de la crítica. Pese a eso fue nominada a un Oscar y a otras quince nominaciones, además de ser considerada la mejor película en la que ha actuado Brad Pitt, incluso por encima de Seven. Lo más extraño es que la película no fue considerada lo magnífica que era hasta muchos años después de su estreno. La película se convirtió en una de las más controvertidas y de las que más se hablaba en 1999. 'The Guardian' la vio como un presagio de un cambio en la vida política estadounidense y describió su estilo visual como innovador. El film encontró el éxito comercial con su lanzamiento en DVD, lo que facilitó que se convirtiera en una película de culto.
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